14 croquetas (prólogo - lo que pasó en Los Romanes no se queda en Los Romanes)

Una malagueña, dos malagueñas, tres malagueñas y todo lo que debió ser este post y no pudo ser.

Por desgracia para muchos, quizás más para mi que para nadie, me he metido en un jardín con este post del que no estoy seguro que vaya a salir bien parado.

El fin de semana del domingo 15 de junio pasamos desde el viernes hasta el domingo unos días geniales. Un pintoresco grupo de músicos unido por la casualidad, músicos de oído, la única clase de músicos que he conocido, gente fantástica con unas ganas de risa y fiesta como nadie, que se dejaron en el pueblo de Los Romanes algo más que las voces a lo largo de aquellos tres días.

La casualidad fue que La Ronda de Motilleja fue invitada por la organización de la fiesta de Verdiales de Los Romanes, quedando la casa que iban a ocupar con algunos huecos libres. Así las cosas, nuestro amigo Jesús nos convocó a unos cuantos para que llenáramos esos huecos.

Por parte de Barranda yo no me lo pensé demasiado, y enseguida se unió mi amigo Carlos junto a su novia.
Más tarde el día de autos (el del viaje, vaya) nos iriamos junto a varios amigos de Caravaca.

El paseo en coche hasta la sierra de Málaga sirvió para echar ya las primeras risas junto al abuelo y Pepe de Caravaca. Juanico, Lurdes y Mari Cruz completaban los coches que venían de la Comarca del Noroeste murciana.

Al llegar al pueblo de Los Romanes nos faltó tiempo para echar la primera cerveza (estabamos secos tras el largo paseo), pero alguno de los nuestros ya nos llevaba ventaja, de echo Carlos ya llevaba un buen rato en el sitio.

La música no llegaría hasta el día siguiente, pero mientras tanto nos dedicamos a instalarnos, a saludar a los amigos, a seguir echándonos risas. El viernes noche fue largo, pero su cuenta rápido, hágamos un símil con el principio del post ... un cubalibre, dos cubalibres, tres cubalibres ....

¿Quien dijo que los músicos somos unos vividores y unos borrachos? Pues no veis que no!!!!

Entre cubata y cubata sonaba "Latino Turner" y seguían las risas. Las cinco y media de la mañana llegaron y a aquellas horas decidimos que ya estaba bien de tontería, que al día siguiente no íbamos a ser personas .... de todas modas, algo de anís del mono que se mezcló no se como con mis cubatas se encargo de recordarme que los excesos se pagan .... una vez más.

El sábado por la mañana apareció la última inquilina de nuestra casa, Sarita de Motilleja junto con su hermana. Hablaremos más de ella después.

Salimos a desayunar a deshoras y no tardamos en armarnos con los instrumentos. La comida ya nos esperaba poco después del desayuno y entre los pocos que eramos el comando Caravaca - Barranda ya hicimos algo de ruido entrando al bar.

Entre copla y copla se alargaría la comida hasta las cinco y pico. Nuestro gran momento del fin de semana llegaba por la noche así que pensamos que sería buena idea echar un descanso antes de la noche .... sin embargo, durante la vuelta instrumentos en mano no perdimos ocasión de echarle una música a una vecina asomada al balcón.

Y por último la gran noche. Paseo por las calles de Los Romanes, todos los grupos en procesión, todos verdiales menos nosotros .....

¿Y que más pasó? ¿Y como fue la vuelta? ¿Que hay de Sarita? ¿Y que fué del anís del mono?

Mucho más en el post - completo, permaneced atentos a vuestro Facebook .....

Un abrazo de un perturbado.

P.D. Sin que sirva de precedente, me ha venido así al tirón este prologo de un post que se me está alargando más de lo normal, no he sido capáz de escribirlo del tirón, se está convirtiendo en una especie de mi diario del viaje, y no quisiera dejar de lado ningún detalle que me pareciera simpático o chocante .... seguid atentos al blog y perdonadme el retraso.