domingo, 18 de octubre de 2020

Informática, ciencia inexacta

 Que no os confunda el título del post. Odio esa frase y no puedo estar más en desacuerdo, lo dejo claro desde el principio. Así y todo, el relato que os vengo a contar ahora no puede sino en cierto modo, confirmar este título, por eso lo he elegido como tal.

La verdad es que esto primero iba a ser un "solo para informáticos" o algo parecido, pero resultan fascinantes a veces las cosas que nos pasan a los programadores también, así que, por que no contarlo para todos.

Bueno, al grano ... para los que no lo sepáis, buena parte de mi trabajo actual consiste en desarrollar funcionalidades adicionales para el programa con el que trabajamos (más bien, que vendemos) en mi empresa.

El lenguaje de programación que utilizo es C# (charp). Nuestro programa nos permite instalar librerias desarrolladas en este lenguaje que incorporan funcionalidades nuevas (resumiendo).

La cuestión en si es que estamos empezando a implantar versión nueva del programa, y los desarrollos que teníamos han empezado a fallar. He tenido que ir descubriendo los fallos y haciendo adaptaciones, que ha veces han sido mera cuestión de configuración, o a veces han implicado  alguna pequeña modificación en el desarrollo de poca importancia .... hasta la semana pasada, en la que uno de los desarrollos se convirtió en un DOLOR DE CABEZA.

Y el dolor de cabeza no fue porque los cambios que haya tenido que hacer lo fueran, en absoluto ... el error que aparecía, a ver si puedo hacer que todos lo entendamos, era que el programa nuestro decía que no podía cargar la librería que había desarrollado ... este error yo ya lo había visto y creia tenerlo controlado. Pero cuando terminé de hacer todos los cambios que había aplicado en la misma situación con los otros desarrollos, el programa insistía necio en no cargar mi librería ... ME ENTRÓ LA DESESPERACIÓN ...

...

...

Y AHORA VIENE LO TERRIBLE DE LA SOLUCIÓN QUE ENCONTRÉ .... en mi desesperación se me ocurrió simplemente borrar el código de la clase que me estaba dando el error (a efectos prácticos, borre todo el código, borre un archivo, cree el archivo de nuevo, y escribí el mismo código) y lo volví a escribir. Con esto hecho, volví a generar la librería, y problema solucionado.

Desde hace tiempo soy de la idea que no existen los errores informáticos. Es así. Detrás de un programa que funciona mal siempre hay dos motivos:

  • 90% - Mala utilización por parte del usuario.
  • El resto, un error de algún programador.

Es curioso que ahora que el COVID está en todas partes, digan que por un error informático se habían perdido en no se donde, no se cuantos casos que no se habían registrado ... estaban guardándolos en UNA HOJA EXCEL QUE SE SUPONE QUE TIENE UN LÍMITE DE ENTRADAS ... ALGUIEN DEBE SABER ESAS COSAS, ESO NO ES UN ERROR INFORMÁTICO.

En fin, volviendo al tema, puede resultar fascinante el cúmulo de circunstancias que se habrán tenido que unir para que la solución a mi problema haya sido la que os he contado. Puede ser que algo así solamente pase una vez entre un millón, pero creedme, aquí al final había un fallo de algún programador, y en este caso ESE NO ERA YO.

Ahí queda eso.

lunes, 28 de septiembre de 2020

Se me han quemado las lentejas

 El tocinico fresco de la carnicería y su choricico recien cortado. Un par de huesecicos de jamón, dos zanahorias y media docenica de dientes de ajo. Aparto media docena de puñaos de lentejas que echaré cuando haya hervido quince o veinte minuticos .... y que se hagan, que mientras dejo un par de pataticas peladas y partirdas para echarlas al final.

Y con todo esto vamos a cenar. A la vuelta de la cena, pues oye, que les falta un poco de agua y un poco de sal. No pasa nada, se le echa, y en seguida, añade las patatas que las lentejas ya empiezan a estar.

Y ahora viene la cagada monumental. Pues que tengo ahí como treinta cacharros de cristal pendientes de reciclar. Y he visto las lentejas y creo que pueden esperar. Así que ponte a quitar tapas y cacharros a embolsar.

Con todo listo tengo que coger el coche para tirar el cristal, porque a algo más de quinientos metros de mi casa tengo el contenedor, no me apetece andar y además, las lentejas en seguida van a estar, aunque aún pueden esperar ... o eso pensaba yo.

Me cojo mi bolsa de cristal, las llaves del coche y para el contenedor ligericos, no me puedo tardar. Lo que yo no recordaba es que los botes uno a uno los tengo que tirar. Tranquilico llego a casa tras cumplir con la faena, pero recién abierta la puerta, horror, mal olor a quemado que me llega.

Al acercarme a la cazuela y meter la cazoleta lo confirmé, el solaje pegado al fondo, el culpable del olor que me llega.


Siete años llevo en Granja, y seis tuve que esperar para tener un contenedor de plástico cerca de mi casa para poder reciclar. Y al contenedor de cristal siete años llevo yendo en coche sin más cojones si el vidrio reciclarlo quiero.

Seeñores gobernantes, menos cumbres del clima y menos traer a Greta Humber o como quiera que se llame, que para eso si hay dinero, pero por no ponerme un contenedor de cristal, lentejas quemadas para comer yo mañana tengo.

Ahí queda eso ... 


jueves, 20 de agosto de 2020

NO PODEMOS VOLVER ATRÁS

 Nada como estar de vacaciones para ponerse nostálgico. No hace mucho falleció el dueño de un pub que tengo enfrente de mi casa en Barranda. Estamos hablando de un pub que existía cuando ni siquiera se les llamaba pubs. De hecho, puede que estuviera aquí incluso antes de que yo apareciera por este mundo. 

El caso es que a pesar del triste suceso, la roca vive más que la carne, y de la misma forma que el lugar sirvió de sustento a este hombre, ahora le está sirviendo de sustento a un hombre al que yo le sacaré facilmente diez o quince años, pero que ahora mismo está siendo una de mis excusas para salir a la calle, tomarme una cerveza y echar un rato viendo el fútbol. 

Dándole vueltas a esto entre idas y venidas del balón junto con los tragos de cerveza, recordaba otros tiempos.

Tiempos en los que yo empezaba a coger el gusto por los videojuegos, con siete, ocho o nueve años, y me dejaba no se cuantas monedas de cinco duros en una máquina que me ofrecía diez juegos, entre ellos Super Mario o 1942 (uno de avioncitos), y antes que esta puede que el Tetris, o si no después lso míticos Moon Walk (uno de Michael Jackson) o el Golden Axe.

Tiempos puede que con algún año más mi padre me invitaba a una Coca Cola y me enseñaba a jugar al billar americano en una de las dos mesas del pueblo.

Tiempos ya unn poco más recientes en los que los colegas nos pasábamos la tarde dándole a la diana o gastando no se cuantas monedas en el futbolín.

O noches épiccas de fiesta y borrachera que no se sabe como se quedaban cincuenta euros allí a tres con cincuenta la copa.

Y ahora .... miedo. Miedo de tener que volver a echar el cierre por el COVID a todas esas experiencias a las que muchos de vosotros podríais añadir mil historias más, cada uno en el pub de vuestro pueblo.

No podemos dejar de jugar al futbolín, no podemos dejar de divertirnos, no podemos dejar de enseñar a nuestros hijos (aunque yo no los tenga) a jugar al billar, en serio, por favor NO PODEMOS VOLVER ATRÁS.

Triste marioneta

Hilos invisibles, irrompibles

tensando mis brazos y mis piernas,

mi mirada, mi pensamiento,

disfrazados de belleza,

que encierran todos mis sueños.

Engañados con la libertad,

atada con los mismos h los,

la madre de todas las mentiras,

encerrada en el destino,

que gobierna nuestras vidas.

Ama, rie, seña, vive,

pensando que eres tu quien decide,

que equivocado estás,

los hilos de la vida que vives,

algún día te harán zozobrar.


Antes de lo que piensas,

triste marioneta,

el destino que maneja tus hilos,

tus ojos .... los cierra ...

SIN PREGUNTAR.

viernes, 12 de junio de 2020

La verdad os hará libres

Estoy cabreado. Estoy muy cabreado y parece que cuando estoy cabreado las historias que me apetece contar no fluyen, no salen solas ... tengo que hacer un esfuerzo para vomitarlas con asco, como una vomitona tras una buena resaca. Lo que viene a continuación es una parrafada acerca la irrupción en mi casa de los cuerpos de seguridad por error hace ya demasiado tiempo. Es un poco largo y puede que tedioso, pero al final acabareis flipando. Por favor, llegad hasta el final y disculpad lo extenso de la historia. No tiene desperdicio.

Llevo casi siete años de vueltas en mi cabeza y noches sin dormir pensando en aquella historia que ocurrió en mi casa que parece sacada de una película. Para que todos hagamos memoria, hace casi siete años sufrimos por error de las fuerzas del orden un registro en mi casa que pilló a mi hermano dentro y casi acabó con él en un ataúd, dos puertas reventadas y una derribada y con un tabique tirado por los suelos, y por supuesto, un montón de disculpas dirigidas hacia mi hermano y a mi por parte de esas mismas fuerzas del orden tras el flagrante y vergonzoso error.

Aquel día, tras dichas disculpas tuve que llevarme a mi hermano de hospitales, echar a correr para ver de que manera podíamos dejar cerrada mi casa (me quedé sin puertas, ya os lo he dicho arriba), y con la entrada de la terraza de arriba sustituida por un panel de aglomerado de 1 cm. de grosor. Además, un par de días después tuve que sufrir el interrogatorio de un individuo (jefe de la policía judicial o algo así, no lo recuerdo bien) que afirmaba haber visto a un sospechoso (el motivo del registro era que iban detrás de un individuo que daba cobijo a delincuentes y según las investigaciones lo habían visto entrar en mi casa, y pensaban encontrar allí un hervidero de dichos delincuentes) entrar en mi casa. Durante dicho interrogatorio entramos en un estúpido dialogo de besugos en el cual el decía que lo habían visto entrar, y yo decía que tal persona no había estado allí, y el que sí y yo que no, que sí, que no .... hasta que acabe cortando esa estupidez diciéndole "bien, pues habrá entrado en mi casa sin estar yo dentro". Un par de años después, también tuve que pasar la vergüenza de tener a la guardia civil buscándome en mi nuevo trabajo para entregarme la resolución, una asesoría donde teníamos despachos alquilados, donde me "conocían" unas 30 personas, y tuve que ir por allí explicando cosas que no es agradable de explicar.

Si todo esto no fuera suficiente, esta la gracia de andar dándole vueltas en la cabeza a todo esto por las noches y no poder dormir, pensar que el golpe en la cabeza que se llevó mi hermano lo podía haber dejado en el sitio o que lo tuvieran esposado y desnudo como un delincuente durante un par de horas hasta que me llamaran al trabajo para que fuera para allá.

En fin, creo que ya es suficiente puesta en escena. Hay otra persona que lleva esto en la cabeza seis años y medio y es mi abogado, y no me ha dado buenas noticias hoy. Digamos que siento que el pastel que resulta de toda esta historia, le han puesto la más amarga de las guindas. La guinda resulta ser que la demanda que tenemos interpuesta ha sido desestimada por el ministerio de justicia.

Solamente escuchar esa frase así sin descafeinar y sin más explicaciones supongo que es para flipar, como lo ha sido para mi cuando me lo han dicho, pero cuando han llegado dichas explicaciones la cosa ha sido peor aún. Uno dice, ¿cómo van a desestimar la demanda con toda la movida que montaron? .... no os lo voy a contar, este es el texto en el cual se basan para desestimarla tal cual está escrito (puede haber algún error de transcripción era un .pdf escaneado, no he podido copiar y pegar ;) ) en el informe de desestimación:

"Sin embargo, según consta en el acta firmada por el Juzgado de Instrucción nº 1 de Orihuela, el día 5 de diciembre de 2013, no se produjo la diligencia de entrada y registro en el domicilio de los reclamantes, ya que según se manifiesta en aquella, al llegar al número 53 de su calle, se realizó una llamada a la juez que instruía el caso para que confirmase que era la vivienda 53-D, y fue ratificada tal información. En la vivienda se encontraron a uno de los interesados, que dijo vivía allí con su hermano, y que no conocía de nada al investigado. Se pusieron estos hechos en conocimiento de la juez, la cual dio instrucciones precisas para que no se practicara el registro en la vivienda citada. Así las cosas, no es dable apreciar el funcionamiento anormal de la Administración de Justicia que sirve de fundamente a la responsabilidad patrimonial que se exige."

Tras leer todo esto, me quedé pensando que ya no se que es peor, se el hecho de pensar que están diciendo que las puertas reventadas o las lesiones de mi hermano simplemente nos las hemos inventado, o intentar entender como es posible que después de todo lo que ocurrió aquel día exista un juez que firme un acta en la que aparezca semejante sarta de mentiras.

.....

Esperad que aún hay más. Lo curioso es que también tenemos un informe del Consejo General del Poder Judicial que, a pesar de que nos da la razón en que existe un funcionamiento anormal de la Administración de Justicia, informe que contradice frontalmente al anterior, ese mismo informe parece haberse utilizado para justificar semejante historia, porque refleja básicamente la misma historia, es decir, hace referencia a esa misma acta levantada por el juzgado, lo que ocurren es que en este informe primero se reflejan los hechos que ocurrieron tal cual los contamos, a continuación aduce al acta que firmó la juez, con las mismas historias, pero también reconocen el error por su parte, y finalmente concluye probados los hechos que ocurrieron, y que realmente se produce el citado "funcionamiento anormal".

La consecuencia de todo esto, no se que opinaréis vosotros estaría entre dos ideas:

  1. La persona que ha resuelto esto se ha leído solamente el acta a la que se hace referencia en el segundo informe que os he citado, sin mirar nada más, y aferrado a eso ha cogido y se ha quitado el caso de encima.
  2. La persona que ha resuelto esto ha estado escarbando por toda la documentación del proceso, e igualmente, ha utilizado dicha acta para utilizarla como arma para desestimar el caso,


,,,, podéis opinar.

En fin. Tenéis ante vosotros a un hombre que este año lleva cuatro operaciones en la vista de las que no termino de recuperarme, el temporal del año pasado nos inundó la calle y me dejó el coche para el desguace y ahora como guinda del pastel me entero de que hay jueces por ahí que van firmando cosas que nunca pasaron, y que nos dejan como unos putos embusteros ... y todo esto ahora de baja, con el coronavirus por ahí y más tiempo para pensar, pensar por ejemplo que yo tengo que esperar seis años y medio para que esto se resuelva, sigo esperando, y dentro del mismo periodo al padre de Pablo Iglesias lo llaman terrorista y el ya ha recibido 15000 euros por injurias o algo así, pero claro, ni mi hermano ni yo somos el padre de Pablo Iglesias.

Ahora mismo, la verdad, clamo a la vida para que me de un respiro ... un día de estos.

domingo, 5 de abril de 2020

Prohibido cobrar

Con Joaquín Sabina de fondo, dado que es un ejemplo de inspiración como cualquier cantautor que se precie, resulta irónico pensar en lo mucho que me está costando empezar (que no encuentro inspiración, vaya) a hablar de la situación que todos estamos viviendo desde hace ya varias semanas, situación inédita, dura y dolorosa para algunos menos afortunados que yo.

Supongo que después de tantas palabras, opiniones, memes e historias acerca de nuestro nuevo enemigo común, lo único que no os hace falta es otro pesado hablando del tema, así que igual si estáis tan cansados como yo de oír hablar del bichito, os recomiendo que dejéis de leer.



Lo que pasa es que como en otras ocasiones, no se de que forma, desde hace algunos días se me ocurrió una locura estúpida de la que podíamos escribir unas lineas y quizás, pasar un buen rato, que a fin de cuentas es de lo que se trata ahora, intentar no dejar de pasar buenos ratos, por muy jodidos que estemos.í estoy

Si echamos la vista atrás y vemos todo lo que está pasando, pensando tontamente, podíamos haber bautizado al bicho como "prohibidovirus". La aparición de este virus ha desembocado en una situación en la que para pararlo la solución mientras aparece la vacuna es ir poco a poco prohibiendonos todo.

¿Enumeramos así un poco a lo loco, poniendo ejemplos?

Empezamos por prohibir darnos abrazos y besos, más tarde nos prohiben acercarnos unos a otros a más de metro o metro y medio, a continuación prohiben la apertura de negocios tales como locales comerciales y de ocio, y a la vez, nos prohiben salir de casa salvo para comprar, ir a trabajar o al médico, y por último se prohibe cualquier actividad laboral no esencial, con lo que prácticamente nos prohiben a la gran mayoría de personas el ir a trabajar ... (así estoy ahora enganchado a las series y a la play4) ... con todo esto ya se están quedando sin cosas que prohibir y van a tener que ir pensando algo más para terminar de solucionar esto ... pero en este punto llega la locura de la que os hablaba al principio, y el caso es que si que quedan cosas para prohibir.

Y es que, estando como está ahora mismo el país paralizado, aquí nadie gana dinero, excepto quizás empresas que siguen cobrando, como empresas energéticas o de telecomunicaciones (que yo sepa, nadie ha dejado de pagar el recibo de la luz, del agua o del teléfono ni de internet). Pero bueno, dejando esto último a un lado,

¿a nadie se le ha ocurrido que podíamos haber PROHIBIDO COBRAR?

¿Pot qué no? Pensadlo un momento, sacamos un decreto ley de estos que salen ahora como churros, y aquí en este nuestro país, pues eso, no cobra ni Dios. Ojo, yo el primero. Y sigo hablando, porque se que ahora mismo estáis diciendo que el tío este está mal de la cabeza, no sabe lo que dice, o que el coronavirus se le está comiendo el cerebro ... a ver ... yo solo digo lo siguiente, vale, yo no cobro cierto, pero el de la panadería tampoco, os pongo la típica conversación al ir a por el pan.

- Buenos días - cualquiera de nosotros -
- Buenos días - el panadero - ¿qué desea?
- Una barra grande, por favor.
- Aquí tiene.
-¿Cuánto es?
- Será 1,20 por favor.
- Aquí tiene, muchas gracias.
- Gracias, que pase un buen día.
- Igualmente.

Ahora veamos la misma conversación sin el intercambio económico:

- Buenos días - cualquiera de nosotros -
- Buenos días - el panadero - ¿qué desea?
- Una barra grande, por favor.
- Aquí tiene.
- Muchas gracias.
- Gracias, que pase un buen día.
- Igualmente.

(perdonadme que igual la conversación no es tan típica y normalmente sería más corta, puede parecer un poco más de los 70 u 80 y que ahora no somos tan leidos, pero me molaba como quedaba de esta forma en el post),

Pues oye, tampoco queda tan mal no. Pero claro, ahora me diréis que de donde hace el pan el panadero si no nos cobra. Pues os contesto de la misma forma, a el nadie le va a cobrar la harina, y así sucesivamente.

Os he puesto el ejemplo del pan porque era el más sencillo que me parecía, y a fin de cuentas, ya sea al panadero o a la del supermercado, todos nos dejamos dinero en pan (y si alguno hay que no, pues que piense en el litro de leche, los huevos o el brócoli si eres vegano, coño, no me lo pongáis difícil).

La cuestión es, pensando primero en mi, que si yo no cobro puedes decir, pues que putada, pero la verdad es que ahora mismo, si yo no tuviera que pagar la barra de pan, para que ostias me hacen falta los 1000, 2000 o 3000 y pico euros al mes, o lo que ostias cobre, si puedo ir a por el pan de gorra. Y lo mejor de todo, es que esos euros estarían esperándome en las arcas de mi empresa, para volver a cobrarlos cuando todo esto pase, mi empresa no quedaría debilitada por el paso del dichoso bicho. Esto no es más que pensar que si las empresas no están ganando dinero, pues no pueden pagar, pues bien, si nadie cobra, no hay nada que pagar. Simple.

....
....

¿Simple? No. Y aquí se acaba la locura. Todo lo que he dicho resulta irrealizable, a mi mismo se me ocurren varias razones, donde dije digo digo diego.

  • La gente por desgracia nunca está dispuesta a trabajar por amor al arte.
  • La jodida picaresca humana, siguiendo con el pan, seguro que de repente nos haría falta más del normal.
  • No estamos tan unidos como para lograr algo así, por mucha globalización de la que se hable.
  • No estamos solos en el mundo, no somos autosuficientes, al final, en algún punto de la cadena habría que pagar a alguien, no todo el mundo dejaría de cobrar.

En fin. Esto se termina. La verdad es que todo esto a fin de cuentas queda en otra de tantas locuras de mi perturbada mente, un poco más perturbada estos días si cabe por la soledad y la inactividad ... simplemente, me pareció una idea bonita pensar en que dado que la situación que vivimos es totalmente excepcional, pues entre todos, pudieramos ponerle una solución aún más excepcional, me pareció una idea graciosa dado que ahora la consigna es prohibir, pues oye, una más que menos, que más da, y finalmente y a la vez ... pues me entristecía un poco. Me entristecía darle la vuelta y pensar que ante una situación tan extrema como la que estamos viviendo, pues no seamos capaces de llegar a adoptar una medida tan extrema (e insostenible, por desgracia, pero bueno, igual se podría intentar) como la que comento.

No cobrar ... hasta a mi me hace gracia ... pero en fin, me repito, me pareció bonito pensarlo, y en este momento casi se me escapa una lágrima, porque ya digo, a veces me gustaría pensar que el ser humano pudiera ser capaz de algo así, y me da pena SABER QUE NO LO ES.

Va siendo hora de cenar. Dentro de un rato, creo que ya que no he pillado el coronavirus, lo que si voy a pillar esta noche es el CUBATAVIRUS ... brindaré por todos vosotros por que recuperemos los que no nos hemos podido tomar estos días y por que nos reunamos a tomarnos unos cuantos entre abrazos, besos y risas.

P.D. En serio, lo del principio no es broma ... si este posto me ha llevado media hora o tres cuartos, sea lo que sea, he estado mínimo quince minutos mirando la pantalla del ordenador, sin saber como empezar ... todas y ninguna de las formas que se me ocurrían eran igual de buenas y malas a la vez.

P.D.2. Esto es una tontá, solo por aclarar, lo de la barra grande, en Barranda, de toda la vida el panadero de mi pueblo llevaba barras grandes, medianas y bocadillos, aparte de los panes grandes o los panes redondos, seguro que a más de uno le ha parecido raro, o no, por si acaso os lo aclaro, sin más.