martes, 23 de octubre de 2012

Egoimor

Los seres humanos en si somos harto complicados. Somos los únicos seres vivos (que nosotros sepamos) capaces de desarrollar un comportamiento razonado, con una inteligencia muy por encima de la que puedan demostrar cualesquiera otros seres que pueblan nuestra tierra y capaces de desarrollar las maravillas que llenan hoy nuestro planeta y que a muchos nos parecen aún hoy día elementos incluso de la ciencia ficción.

Luego por supuesto está el tema de los sentimientos, las emociones. Amor, odio, tristeza, alegría, son palabras que solo existen en el mundo de los seres humanos.

Uno de los sentimientos más complicados que existen, supongo que todo el mundo está de acuerdo, es el amor. El amor mueve montañas, el amor lo puede todo, lo único que necesitas es amor, .... hemos acuñado tantas frases elogiando el preciado amor, algo sin lo cual parecemos incapaces de tener una vida completa, si no todos los que habitamos nuestro planeta, al menos, si una gran mayoría.

Que bonito es el amor ..... yo la verdad es que en los días que corren es un sentimiento que tengo algo atravesado. Siempre he pensado que soy una persona independiente y bastante autosuficiente, pero todo esto no es incompatible con el hecho de que suspire por un amor en mi vida. Nací para querer, para agasajar a alguien que me quiera acompañar en el incierto sendero de la vida, "sigue el camino de baldosas amarillas, Dorothy, y encontrarás a la bruja del este, ella te enviará de vuelta a casa". OJALA EXISTIERA ESE CAMINO PARA ENCONTRAR EL AMOR.

Yo me lo encontré un buen día, por pura casualidad y sin buscarlo, un amor que se hizo inmenso en mi interior, hasta el punto que tal vez se convirtió en lo más importante que existía en mi vida, craso error, pensarán muchos, el problema es que yo quise que fuera así, quizás porque yo no se llevar esa situación de otra manera, estar enamorado no tiene porque ser estar entregado a alguien, pero creo que yo fui incluso mucho más allá de eso, tal vez algún día me extienda más sobre esto.

Luego tenemos el "Ego" de la persona, el "Yo", algo que creo que "yo" no termino de entender. Esta claro que las personas tenemos que mirar por nosotros mismos, porque si no lo hacemos así no podemos pretender que nadie esté por ahí mirando por nosotros, yo por lo menos no espero eso de nadie, pero esto no significa que seamos individuos que intentemos estar por encima de los demás. Es difícil para muchas personas conseguir esto, ya que se erigen en seres vanidosos que no son capaces de ver más allá de uno o dos centímetros delante de sus narices, su mundo son ellos mismos y todo tiene que girar alrededor de ellos, su felicidad pasa por que el mundo gire alrededor de ellos, y esto al tiempo, no puede haber personas que lo soporten, pero el caso es que existen personas así, y me entristece.

Y luego el egoismo, algo tan natural en las personas como podría ser el nacer o el morir, fijaros con todo lo que estoy escribiendo por aquí, pero es que también creo que las personas somos egoístas por naturaleza. En serio, si tuviéramos que pensar en la parte de nuestro cuerpo que tenemos más grande virtualmente hablando, esta sin duda alguna sería el ombligo, ya que nos lo miramos más de lo que deberíamos. El mayor problema que puede tener el egoismo es que descuidamos nuestras relaciones con los demás a la vez que queremos que los demás hagan más de lo que ya hacen por nosotros (remarco la frase para que os haga pensar).

Dicho todo esto llegamos al punto de partida, egoimor, ego - egoísmo, amor, hablemos del egoísmo que habita dentro del amor incondicional. Las personas nacemos, vivimos y nos relacionamos con otras personas y dentro de esas relaciones es inevitable que surja el amor, precioso amor, pero, ¿puede ser posible que exista egoísmo en el amor?, yo pienso que si.

Creo que las personas que empiezan a vivir una relación de intenso amor con otras, en el momento que detectan que lo que ellos sienten es demasiado poco en comparación con lo que siente la otra persona, tienen que plantearse en dar un paso atrás y retirarse, o dar alguna señal a la otra persona para que al menos esto frene un poco, aún a riesgo de terminar con una relación. Entiendo que esto es muy difícil de calibrar, pero es precisamente en este punto donde está el egoísmo del que estamos hablando. ¿Por qué ese egoísmo, de que narices estás hablando? pensarán muchos, pero en realidad es mucho más sencillo de lo que creéis, porque, hay que ver QUE BIEN ESTOY CUANDO ESTOY ENAMORADO, de eso se trata, TU estás muy bien, pero si existe la más mínima posibilidad de que esto cambie, hay que parar, al menos, hay que hablar con la otra persona, porque si un día decides terminar lo que empezaste es posible que provoques un daño sobre la otra persona del que le va a resultar muy difícil recuperarse, y francamente, pensémoslo aunque sea egoístamente,


NO NOS GUSTARÍA ESTAR EN EL OTRO LADO

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