sábado, 15 de diciembre de 2012

Melancolía por el futuro perdido

Llevo unos seis meses viviendo en mi casa nueva, cuatro de ellos he estado solo y el último mes y medio o dos meses está mi hermano conmigo. Este fin de semana me he quedado por aquí para intentar pasar lo mejor posible un virus que me ha cogido por sorpresa y me obliga a moquear continuamente y me produce unos sudores fríos que no tienen ninguna razón de ser, ya que fiebre no tengo, lo único que tengo son mocos, los ojos llorosos y un dolor de cabeza que no se ni como me permite escribir.

La cuestión es que este largo fin de semana aquí en soledad y sufriendo la enfermedad también me deja bastante tiempo para pensar entre cada una de las series de televisión que me estoy tragando, ya que tampoco es que me sienta con ganas de otra cosa, y tanto pensar la verdad es que tampoco es que me haga mucho bien .... en fin, que pensando, pensando, me he dado cuenta de que después de unos aproximados seis meses aquí, cuando pase un año no voy a poder celebrarlo .... y no voy a poder celebrarlo por la sencilla razón de que no me acuerdo del día que me vine a vivir aquí ..... recuerdo que fue un lunes, no se porque, y poco más .... bueno en realidad no un lunes, fue más bien un domingo por la noche, vaya, que ni siquiera recuerdo bien ese detalle... no recuerdo el día, no recuerdo el mes ....

Todo esto me lleva bastante más allá. Las personas no podemos evitar cometer errores, y no podemos evitarlo en ninguno de los ámbitos de nuestras vidas. El mayor error de mi vida ha sido enamorarme, un error que por desgracia se que voy a volver a cometer. Pero también se que en la ruptura de una relación las dos partes muchas veces no son conscientes de todo lo que se pierde con esa ruptura, y en mi caso, el hecho de darme cuenta de que nunca celebraré el aniversario de mi llegada a esta casa me ha hecho pensar en ello ....

El aniversario de nuestra llegada, la primera vez que hubiéramos cocinado juntos, la primera noche juntos en nuestra cama, nuestra primera noche en nuestro sofá viendo nuestra primera película, la primera noche sentados en la terraza, o cuando hubiéramos hecho el amor por primera vez en cada una de las habitaciones de la casa .... y así podría seguir eternamente.

Resulta triste pensar en todo lo que pudo ser y no será nunca, y más triste aún es que personas "buenas" que solo desean un poquito de felicidad en esta vida tengan que sufrir por ello. Sin embargo, como se suele decir el que no juega no gana, en esta ocasión jugué y perdí, perdí todo eso que he dicho anteriormente y muchísimo más, pero se podría decir que estoy de nuevo en el campo, seguimos adelante y el partido no termina hasta que no estamos muertos, aún tengo mucho tiempo para ser feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario